Las mentiras de las dietas personalizadas

Las mentiras de las dietas personalizadas

Es habitual que el tema de la dieta 100% personalizada se use como reclamo en los centros que ofrecen tratamientos para adelgazar. Así mismo, también se suelen usar otras frases que sirven de gancho para llamar la atención de los posibles pacientes, frases tales como: cambiamos el menú cada semana para que no te aburras de la dieta. 

Hoy vamos a reflexionar sobre qué hay de verdad y qué hay de mentira en los anuncios de las dietas, en especial de aquellas que se autodenominan dietas personalizadas. 

¿Debe una dieta ser personalizada?

Absolutamente sí.  Las dietas deben ser personalizadas, es decir, deben planificarse teniendo en cuenta las necesidades calóricas de cada persona. Eso quiere decir que hay que tomar en consideración la edad del paciente, el sexo, el tipo de trabajo que realiza, si hace actividad física o no, etc. 

Por lo tanto, desde el punto y hora en que se tienen en cuenta estas características, la dieta es personalizada.

¿Los cambios de menú garantizan el éxito de la dieta?

La respuesta a esta pregunta es no. 

La variedad en la dieta es un factor importante para evitar el aburrimiento del paciente, eso es cierto. No obstante, el truco que se esconde detrás de los cambios de menú semanales que sirven de reclamo en muchas dietas es el siguiente: pongamos como ejemplo el bocadillo del desayuno. La primera semana se pauta un bocadillo de jamón para desayunar, la segunda un bocadillo de salchichón, la tercera un bocadillo de mortadela… y así sucesivamente. ¿No sería más sencillo poner en la dieta “bocadillo de embutido” y que el paciente elija qué embutido quiere poner? 

El ejemplo del bocadillo nos sirve para ver el truco que se esconde tras los supuestos cambios de menú semanales de algunas dietas. 

Existen programas informáticos que hacen dietas perfectas, muy personalizadas, que cuentan los gramos de cada alimento que debes comer y cual tiene que ser ese alimento en cada momento. Son dietas que, sobre el papel, son perfectas. Pero, ¿de qué sirve una dieta perfecta sobre el papel si luego el paciente tiene dificultades para seguirla porque es demasiado estricta? 

Lo importante de una dieta es que sea efectiva pero también que sea fácil de llevar a cabo. Para nosotros es muy importante que la dieta incluya parte de flexibilidad para que el paciente pueda adaptarse a cada situación y a las necesidades de cada persona, que son cambiantes, no son siempre iguales. 

Si quieres saber más sobre las verdades y las mentiras de las dietas personalizadas,  te recomendamos que escuches el capítulo de esta semana de El Podcast de la Doctora Torrejón. En él la Dra.Carmen Torrejón nos cuenta de primera mano su experiencia tras décadas dedicándose a ayudar a pacientes a dejar atrás la obesidad y el sobrepeso para siempre.